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Autoridades del Senasa y la Afip implementarán un Documento de Tránsito Sanitario Vegetal Electrónico (DTVe) por medio del cual comenzará a implementarse un corralito contra la evasión en el sector frutihortícola.
“Hoy actuamos muchas veces como bomberos, porque salimos a atajar problemas, pero trabajando con conjunto con la Afip vamos a poder realizar un trabajo preventivo sobre los inconvenientes de inocuidad que podamos llegar a tener”, explicó el titular del Senasa, Ricardo Negri, durante una conferencia realizada hoy en la sede la Afip junto al titular de ese organismo, Leandro Cuccioli, y al ministro de Agroindustria Luis Miguel Etchevehere.
En una primera etapa –que se instrumentará en los próximos días con una resolución por publicar en el Boletín Oficial– se dispondrá que los productores de frutas y hortalizas deban cargar en línea el DTVe al momento de enviar una carga a mercados concentradores, industrias, empresas empacadoras y mayoristas. El receptor de la mercadería tendrá un plazo de tres días, posteriores al arribo de la carga, para aceptar o rechazar –de manera total o parcial– el envío. En una segunda etapa el régimen abarcará los canales de comercialización minoristas.
El régimen, además de permitir un mayor control fiscal del sector frutihortícola, está orientado a lograr un sistema de trazabilidad orientado a garantizar la inocuidad de frutas y verduras.
“Los evasores que perseguimos son los que no están cuidando lo que consumen los argentinos hoy”, aseguró Negri, para luego añadir que para los operadores que están registrados el nuevo régimen implicará una simplificación burocrática “porque estamos unificado dos trámites en un solo y que será en línea”.
Los primeros productos que ingresarán en el nuevo régimen son frutas y hortalizas pesadas (como papas, batatas, zapallos y zanahorias). Posteriormente se incluirán las verduras de hoja. “Queremos implementar un solo estándar sanitario para todos los productos y no sólo para aquellos que se destinan al mercado externo; con la inocuidad no se joroba”, apuntó el titular del Senasa.
Cuccioli señaló que en 2017 se realizó un relevamiento en 55 mercados concentradores de futas y verduras a nivel nacional, en el cual se detectó que un 65% de 4968 puesteros encuestados presentaban irregularidades (desde monotributistas mal categorizados hasta personas que estaban dadas de alta como contribuyentes).
“Esta estrategia nos va a permitir fiscalizar y entender las cantidades físicas que manejan los contribuyentes en cada cadena alimentaria”, explicó Cuccioli. “La estrategia de la Afip en los próximos años será la cruza de datos a una escala masiva en todos los sectores”, proyectó.
Con respecto al Remito Electrónico Cárnico (REC), que comenzará a regir el próximo 1 de septiembre para fiscalizar a las carnicerías, Cuccioli dijo que “hay carniceros que trabajan en negro, pero otros están en blanco y es importante que se aseguren las mismas reglas de juego para todos”.
El titular de la Afip adelantó que antes de fines de este año se implementará –tal como sucedió en el sector cárnico bovino– un remito electrónico de harina y subproductos de la molienda de trigo, así como la implementación de un “libro electrónico” para certificar el volumen de aves ingresados a faena y un sistema de liquidación del servicio de cría de pollos y de compraventa de pollos.
Para 2019 los sectores que están en la agenda conjunta de la Afip y Senasa son los lácteos, azúcar, yerba mate y pesca (aunque no se descarta que puedan incluirse otros).
Cuccioli informó que el pago a cuenta de IVA para autorización de faena de bovinos y porcinos cuenta actualmente con un cumplimiento superior al 98%, lo que permite generar una trazabilidad de prácticamente toda la hacienda comercializada a nivel nacional.
