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Algunos aspectos que usted como ganadero puede mejorar y otros que son necesarios eliminar, le permitirán mejorar el resultado de su negocio. Un ganadero lo hizo y mejoró su bolsillo.
“Para lograr una mayor rentabilidad en la ganadería es indispensable ajustar algunos aspectos administrativos en su unidad productiva que seguramente los conducirán a reducir costos o eliminar los innecesarios, pero igualmente a producir menos y utilizar de manera más apropiada los recursos de los suelos”, aseguró Nicolás Sierra ganadero de Caucasia en el departamento de Antioquia, quien además es administrador de Negocios y consultor agropecuario.
“He logrado obtener rentabilidad hasta del 6 % mensual en cría, levante y ceba y lo he conseguido mediante la implementación de algunos parámetros de producción y la eliminación de otros”, afianzó.
De acuerdo con Sierra, lo más importante es hacer una reforma gradual en el manejo de praderas hasta obtener un manejo regenerativo adecuado que respete la fisiología del pasto para que este registre una mayor producción.
En ese sentido, no hay reglas generales porque las condiciones geográficas son diferentes, pero se debe tener presente un principio básico que es el descanso, el cual, estimó entre 35 y 60 días y hasta de 90 días en temporada de sequía.
Para el ganadero, hay esquemas acostumbrados a la fertilización, pero este tipo de insumos se pueden eliminar y dejar que la naturaleza haga su evolución normal. Este es un costo que se puede restar.
Según el ganadero, es necesario reducir los requerimientos alimenticios de los animales, ellos se acostumbran a solo pasto y es más conveniente para su desarrollo.
“Solucionado el tema de la alimentación es de gran trascendencia adaptar el biotipo animal. Los ganaderos hemos estado detrás o pendientes de imitar los modelos foráneos canadienses y americanos, principalmente, los cuales, no son los más indicados para nuestro medio. Conscientes de eso hemos realizado cruces que han tenido buenos resultados”, sostuvo.
Los ganaderos dedicados a la lechería especializada, por ejemplo, acudieron al Jersey y Holstein. Otros en el norte de Antioquia han confiado en las razas criollas Hartón y Bon. El Hartón lo han trabajado más en el Valle del Cauca y en la Costa Caribe.
En estos tipos de ganado se ha mejorado la adaptabilidad, la sanidad y la productividad en términos económicos.
“En general, no interesa que los animales produzcan menos, pero lo que sí es prioritario es disminuir significativamente los gastos, para lograr una mejor ganancia del negocio”, resaltó Sierra.
