En la última semana, recortada por los feriados de Semana Santa, las categorías de machos y livianos comercializadas en Liniers perdieron con creces el 1% que habían ganado en el período previo. Los novillos, retrocedieron 3%; los novillitos, 4%; y los terneros gordos, 5%.
Por su parte, las vacas cayeron un contundente 10%, manteniendo la debacle registrada desde mediados de febrero, que ya acumula una pérdida de la cuarta parte de su valor de entonces.
La oferta resultó de apenas la mitad del promedio semanal del último año, cuando en la anterior lo había superado en 10%. En las Pascuas de 2017, la entrada en el mercado había caído un poco menos en relación a ese promedio móvil (37%).
En la comparación con los precios nominales de hace 30, 60 y 90 días, los machos y los livianos reflejan caídas leves en un mes (3-5%) y en dos meses (2-3%) mientras que en el trimestre tienen un saldo positivo (1-3%), aunque inferior a la inflación acumulada.
Las vacas, en cambio, tienen retrocesos amplios en las tres mediciones, en el eje del 20%.
Remates Feria
Valores reales
El precio real del novillo de la última semana fue 10% inferior al promedio móvil de un año y 15% más bajo que el de hace un año.
En el caso de las vacas, en la última semana su precio equivalió al 58% del correspondiente al novillo, lo que es un valor bajo para marzo. Se parece al tercer mes de 2014 y es menor al de los tres años últimos. Esa relación, se acerca más al valle de mayo-julio que a la estacionalidad de marzo. Es indudable que la sequía está empujando a una mayor oferta de vacas para faena.
Durante el mes pasado, el precio real del novillo perdió lo que había ganado en febrero, volviendo a los valores de diciembre y enero. Con estos dos meses, marzo tiene la cotización real más baja desde enero de 2010. En relación a los promedios mensuales de este siglo, marzo se ubica 40% por debajo del pico de diciembre de 2010 y 80% más alto que el valle de diciembre de 2001. De otro modo, el precio real de marzo fue 7% menor al promedio de casi 20 años.
