Un invierno que se despide con señales de primavera
El comportamiento del clima durante la última semana de agosto no solo anticipa la llegada de la primavera, sino que también ofrece un alivio esperado para la actividad agropecuaria. Las temperaturas elevadas y la mayor estabilidad favorecen la recuperación de suelos y cultivos, tras un invierno que se caracterizó por frecuentes irrupciones de aire frío.
La expectativa sobre la Tormenta de Santa Rosa combina tradición y ciencia: mientras los registros históricos sostienen una probabilidad significativa de tormentas en torno al 30 de agosto, los modelos actuales refuerzan la posibilidad de inestabilidad hacia fin de mes. Para el productor, estos cambios marcan un escenario a seguir de cerca, ya que pueden condicionar tanto labores de campo como el inicio de campañas agrícolas.
La última semana de agosto se presentará con tiempo estable y ascenso de temperaturas en gran parte del país, aunque hacia fin de mes crece la expectativa por la tradicional Tormenta de Santa Rosa.
La circulación de viento norte será la protagonista de la última semana de agosto en Argentina. Este patrón favorecerá un marcado aumento de la temperatura y un progresivo incremento en la humedad, generando condiciones muy similares a las de la primavera en pleno invierno. El escenario predominante será de estabilidad, con poca nubosidad y buena presencia de sol en la zona central y norte del país.
Remates Feria
La única excepción se dará en la Patagonia, donde durante este domingo aún persistirá la inestabilidad junto con ráfagas intensas. Sin embargo, se espera que desde el lunes también en esa región comiencen a mejorar las condiciones, acompañando al resto del territorio nacional en un contexto más estable y templado.
Este marco meteorológico coincide con la llegada de una fecha muy particular en el calendario climático: el 30 de agosto, día en el que la tradición popular ubica a la conocida Tormenta de Santa Rosa. Año tras año, esta referencia despierta interés y, en ocasiones, coincidencias con eventos de inestabilidad propios de la transición estacional.
La última semana de agosto con clima primaveral
Durante los próximos días, la circulación de aire del sector norte se mantendrá persistente, asegurando temperaturas elevadas para la época y condiciones más propias de septiembre que de agosto. En el centro y norte del país, las marcas térmicas podrían superar los valores medios para el cierre del invierno, lo que sumado a la humedad en aumento aportará una sensación de ambiente primaveral generalizado.
En la región patagónica, el viento intenso que domina este fin de semana será solo transitorio. A partir del lunes se esperan mejoras sostenidas, con una progresiva estabilización del tiempo que se extenderá hacia mediados de semana. Así, el escenario tenderá a ser homogéneo en todo el país, con predominio de sol y temperaturas en ascenso.
Este panorama refuerza la idea de una transición temprana hacia condiciones primaverales, lo que en términos productivos representa un respiro luego de semanas marcadas por el frío y la inestabilidad en varios sectores del país.
La tradición de la Tormenta de Santa Rosa
El 30 de agosto es la fecha en la que se conmemora a Santa Rosa de Lima, y con ella surge el mito de la tormenta asociada. Aunque popularmente se considera que ese día ocurre un episodio de tormentas, los registros meteorológicos muestran que no siempre se da un evento de magnitud, aunque la coincidencia con fenómenos de inestabilidad es relativamente frecuente.
De acuerdo con los registros del Servicio Meteorológico Nacional, analizados en el Observatorio Central Buenos Aires entre 1906 y 2023, en un margen de cinco días antes y cinco días después del 30 de agosto, se registraron tormentas en 57 % de los años. Esto significa que, aunque no se produce todos los años, el fenómeno tiene una probabilidad estadísticamente significativa de ocurrir en ese período.
Este año, los modelos meteorológicos de mediano plazo, como el del Centro Europeo, ya muestran indicios de inestabilidad para los días 30 y 31 de agosto en la zona central y el litoral argentino. Si bien aún es pronto para definir la magnitud de los posibles eventos, el escenario de humedad en aumento y persistente circulación del norte ofrece un marco favorable para que el mito de la Tormenta de Santa Rosa pueda, una vez más, encontrar sustento en la realidad.
En resumen, la última semana de agosto se perfila con un predominio de condiciones primaverales en gran parte del país, con temperaturas en ascenso y un ambiente estable. Solo en la Patagonia el domingo se mantendrán vientos intensos, pero desde el lunes se espera una mejora generalizada. Hacia el final de la semana, coincidiendo con la fecha de la tradicional Tormenta de Santa Rosa, los modelos comienzan a mostrar señales de inestabilidad sobre el centro y litoral, manteniendo vigente la expectativa sobre este clásico del calendario climático argentino.
Fuente: meteored
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